EL SECRETO ESTUVO EN JUNTARSE, BAJO LA “BATUTA” DE PALADINES
MACARSA: 2 – BONITA FC: 0
Jugado el 14 de octubre de 1973
Sin temor a equivocarnos podemos asegurar que la actuación cumplida por Macarsa frente a Bonita fue la mejor producción que le viéramos en la segunda rueda. Todo salió a “pedir de boca”, las piezas funcionaron con precisión y ritmo. Macarsa se movió con elocuencia por todo el campo de juego, sus volantes ganaron la batalla y haciendo de su rival un “muñeco de cuerda” manejado a su antojo. Bonita salió al campo sintiendo la derrota que le infringiera Carmen Mora una semana atrás en un partido de trámite amistoso.
Macarsa fue una máquina calculadora
Macarsa fue una máquina calculadora, todos sus movimientos tuvieron precisión y ritmo durante los noventa minutos. El secreto consistió en juntarse volantes con delanteros ara salir desde el medio con pelota asegurada; loable trabajo de sus volantes Paladines y Mosquera, que siempre recibieron la colaboración de Rambay, Batiojas y también Panchana.
Un nuevo desborde de Julio Valarezo y aunque la marca de Echeverría sería vana, al igual que la salida
de Carlos Medrano, el atacante desviaría el remate final, perdiendo una gran oportunidad.
En el medio se decidió la suerte
El ordenamiento de los volantes de Macarsa gravitó para este buen desempeño; en Bonita ni Serafín Da Silva, ni Samaniego, ni Rodríguez pudieron darse lugar para subir en apoyo de sus delanteros, no hubo sorpresa ni llegada, se intentó jugar al pelotazo, dejando mucha responsabilidad en los botines de Milton Da Silva y Cipriano Cheme.
Eduardo Rambay colocó un pelotazo en profundidad para Valarezo, que le había ganado en velocidad a la defesa “roja” y a pocos pasos de Medrano remató fuerte y a la derecha, abriendo el marcador.
Un medio campo estático y carente de ritmo tenía que perder el duelo ante hombres con más dinámica y poder ofensivo como los que exhibió Macarsa. Paladines se ubicó a la usanza vieja de centro half, organizando con orden la salida de juego y repartiendo con sorpresa la pelota hacia las puntas, donde tanto Panchana como Batiojas respondieron a las exigencias.
En Bonita se salvaron Loor y Medrano
Lo hecho por Carlos Medrano y José Loor no alcanzó para salvar a Bonita de la derrota, más aún podemos decir que si no hubiera sido por el meta, Bonita FC hubiera caído por un margen más amplio de goles.
La falla principal radicó en su medio campo, dan do como consecuencia que los delanteros de perdieran ante la superioridad numérica de los defensas contrarios.
Pero volvamos a Macarsa
Si, volvamos a comentar de ese Macarsa que jugando un fútbol sencillo dio buena cuenta del apergaminado rival; la labor de enlace de Eduardo Rambay “enloqueció” a todo el mundo. El enano estuvo por toda la cancha llevando la pelota, pasándola y haciendo gala de un despliegue físico digno de elogiarse, pero eso sí le recriminamos haberse perdido en el minuto 10’ de la primera etapa un gol increíble, sólo frente a Medrano, cuando previamente Valarezo se había sacado por la izquierda la marca de dos rivales, entregándole una pelota como para tocarla y meterla, pero el disparo de Rambay salió despedido fuera del campo.
Batiojas también perdió de anotar
Gerardo Batiojas en dos oportunidades quedó en posición de gol sin llegar a cristalizar sus anhelos, en la primera por explotar una falla de los zagueros rojos y en la segunda al desperdiciar una jugada creada con inteligencia en un tiro libre por Marco Chica.
Valarezo no quería quedarse atrás
Julio Valarezo tampoco quería quedarse atrás y a los 33’ de la primera etapa por demorarse permitió que Serafín Da Silva salvara desde atrás y pusiera tranquilidad en las cercanías de la puerta defendida con acierto por Medrano, pero el gol rondaba las puertas.
Macarsa en los 45’ iniciales había fabricado algunas situaciones de gol que habían sido malogradas unas veces por el defectuoso disparo final y en otras por demorarse mucho, como en aquella ocasión que antes anotamos de Julio Valarezo; también hay que decirlo que el arquero argentino Carlos Medrano había sido un serio escollo para la conversión de los goles.
Hasta que…
Hasta que a los 41’ Macarsa abrió el marcador; Valarezo se “sacudió” y anotó el primero. La jugada nació en los pies de Eduardo Rambay, quién puso una pelota en “callejón” para que Julio se internara y con un remate de derecha obligara al arquero a recoger el balón del fondo de las mallas.
Cuando La pelota parecía filtrarse a las mallas surgió el golero Medrano,
de buena actuación, y con una mano envió al corner.
Un final a toda orquesta
En la segunda etapa Macarsa reafirmó sus pretensiones puestas de manifiesto a través de la primera y desde los primeros minutos estuco complicándole la vida al golero Medrano, quién tuvo que intervenir apuradamente a los 5´para desviar al córner un disparo hecho por Paladines. 4’ más tarde Bonita vio desmoronarse sus cargadas ilusiones cuando Eduardo Rambay puso su sello en un gol hermoso, que determinó la victoria de los cartoneros.
Rambay se fue por “un hueco” y sacó un remate con su pierna derecha, la pelota alta se incrustó por un ángulo difícil de alcanzar. De allí para adelante Macarsa empezó a tocar y tocar, enfriando a su rival que en papel de mero espectador vio pasar la pelota lejos de su alcance; un equipo con una fuerte “carga psíquica” y con evidentes problemas de orden disciplinario fue la conclusión que pudimos sacar del equipo de Bonita.
“El partido lo perdimos antes de entrar a la cancha”: Serafín Da Silva.
“Este partido está muy difícil, le digo más, creo que va a ser tarea titánica salir de ganadores, aquel partido con Carmen Mora ha dejado huellas en la mente de mis compañeros…” fueron las palabras del capitán Serafín Da Silva antes de empezar a jugar el encuentro. Esto nos da la pauta para establecer que la moral y la disciplina no andaban derecha en los “diablos rojos”. Luego seguirían sin conocer la victoria en esta segunda rueda, a pesar de que en el partido siguiente hicieron méritos más que suficientes para salir entre ganadores. El mismo Serafín Da Silva “echaría por tierra” las ilusiones de Bonita al hacerse expulsar del campo de juego frente a Audaz Octubrino, cuando todo se presentaba favorable para recuperar posiciones.
Quiénes destacaron
En Macarsa merecieron citarse Luis Paladines, en este encuentro jugando de volante y no de puntero derecho; su claro manejo y su ritmo en los 90’ hicieron que Macarsa no perdiera hegemonía por el medio.
Marco Chica, el popular “Manaba”, que antes de empezar este campeonato estuvo probándose por muchos equipos sin arreglar con ninguno, en ese Macarsa fue afianzándose cada día, erigiéndose en el caudillo que levantaba el ánimo a sus compañeros, como también fue mejorando su producción técnica.
Eduardo Rambay, con un gran despliegue físico y con rotación por toda la cancha, con ubicación precisa de los espacios vacíos y jugando por todo lo ancho y largo de la cancha.
La alegría de los “cartoneros” al conseguir el segundo gol frente a Bonita. Todos se abrazaron alborozados
al haberse desquitado de la derrota que les infringiera el mismo equipo en la primera rueda.
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