DÁVILA ATAJÓ UN PENAL:

ATARAMA DE PENAL HIZO VESTIR DE VERDE EL CLÁSICO

Jugado el 11 de noviembre de 1973

Alineaciones:

AUDAZ OCTUBRINO: Manuel Dávila; Aldo Tobar, Alfredo Soria, Rodrigo Sánchez, Washington Vuillafuerte; Julio Moreira A., Daniel Atarama; Jaime Sarmiento, Alejandro Faiffer, Benito Castro, Jorge Morocho.

ESTUDIANTES OCTUBRINOS: Galo Lambert; Manuel Quinde, Luis Martínez, Ciro Palomino, Alfredo Alvarado; John Garcés, Washington Kam; Alfredo Bazán, Julio Murieda, Kléber Pacheco, Víctor Figueroa.

Manuel Dávila en una oportuna salida llegará a la pelota antes que Kléber Pacheco; estuvo bien el portero peruano.

Árbitro: Simón Cañarte (más que regular)

Jueces de línea: Leonardo Valencia y Oscar Hadad.

Goles: a los 13’ del segundo tiempo de penal por mano sancionada a Palomino, anotó Daniel Atarama (Audaz); el remate fue alto y a la derecha del arquero Lambert.

Otras alternativas: Manuel Dávila (Audaz) contuvo un penal ejecutado por Luis “Paragua” Martínez; el golero voló hacia su derecha desviando el remate hacia un costado.

Mejores valores: Julio Moreira Álava (Audaz O.) y Luis Martínez (Estudiantes O.)

La claridad de Daniel Atarama sirvió para que Audaz Octubrino fabricara los avances los avances que en su gran mayoría fueron desaprovechados por los delanteros. Julio Moreira, ubicado de líbero delante de la línea de cuatro, cortó los intentos que por su sector se gestaron. Este fue el mejor partido que le viéramos hacer al manabita Moreira. A manera de un limpiaparabrisas quitó pelotas y entregó de primera intención, sin comprometerse, dio respiro a todos sus compañeros entregando con serenidad a Atarama para que fuera éste el que “moviera los hilos” del partido.

 La mejor organización defensiva de Audaz fue importante para la victoria; los de Estudiantes sintieron el esfuerzo realizado una semana atrás frente a Carmen Mora; sus hombres se mostraron muy poco, salvándose apenas el paraguayo Luis Martínez que, sin llegar a su mejor nivel, fue el que intentó crear algún peligro. Los cambios que ensayó Enrique Cantos no trajeron consecuencias, pues tanto Alvear como Pata restaron posibilidades ofensivas; se pretendió ganar pero sin argumentos, ya que Martínez al trabajar de volante, dejó el sector defensivo tambaleante y como los delanteros estuvieron celosamente marcados, el “Paragua” tenía que hacerlo todo y eso era mucho para él.
El partido tuvo pocas jugadas de calidad, jugándose preferentemente en el medio y allí ganó Audaz. Los arqueros tuvieron poco trabajo y eso nos da la medida de cómo se jugó.